Alguien me decía ayer:
Este fin de semana han abierto las calles. Hemos podido salir a las calles de nuevo. Sin embargo, no es lo mismo. Es raro.
Hemos pasado más de mes y medio en casa, haciendo esfuerzos de todo tipo, pasándolo mal, perdiendo muchas cosas, pero sobre todo personales. Tiempo aislados, confinados, distanciados, enfermos, preocupados, atemorizados, enfadados, irritados, superados, agobiados, perdidos, inquietos, insomnes, ... mucho más. Hemos perdido personas, momentos, lugares, trabajos, economía, seguridad, salud, y otra infinitud de cosas que no enumero y que cada cual podrá pensar.
Han abierto las calles y parece que es una vuelta a la normalidad y a la libertad, a recuperar algo perdido. Sin embargo, no lo siento así. Es raro.
Se respira un aire enrarecido, cada cual circula de manera caótica, no sabemos a dónde vamos, no nos podemos cruzar, ¿2 metros, 3 metros, mascarilla, cuál, guantes, alcohol, 1 kilómetro, hasta dónde, con quién, andando, corriendo? ¿Cuántos días así? Hemos tenido que estudiar para salir y a pesar de ello no abro la puerta, salgo y ya está. Cada paso vas pensando, mirando a otros igual de desconcertados que tú, otros que aparentan normalidad, otros que reclaman su libertad, otros que miran desde las ventanas... ¿Eso es normalidad?
Han abierto las calles y no sé si reír o llorar. Es raro.
Soy otra persona más que no sabe cómo va a seguir esto y cómo vamos a volver a la vida fuera de casa. Porque no va a ser como era, porque esto no se ha resuelto y seguimos adaptándonos. Ahora no puedo hacer lo que hacía y si lo puedo volver a hacer algún día siento que no será igual. ¿Qué hemos perdido? ¿Cómo construiremos el camino a las calles?
Han abierto las calles pero no son las que yo conocía.
Han abierto las calles pero no son calles libres y abiertas del todo, están abiertas a medias y no nos movemos fluidamente. Me he dado cuenta de que no sé cómo ir por la calle. En parte creo que he olvidado cómo era y tampoco sé cómo salir ahora.
Han abierto las calles y no sé qué quiere decir, quizás haya que abrir caminos y pensar, sentir y construir un nuevo camino para llegar a las calles.
"Caminante no hay camino, se hace camino al andar."