Ante la situación actual en la que nos encontramos, y como profesional médico y de la salud mental, quiero trasmitir que son momentos difíciles en los que nos enfrentamos a cambios, incertidumbre y mayor fragilidad. En este sentido debemos tratar de mantener la calma y ser pacientes. Vienen momentos complicados a los que nunca nos hemos enfrentado, y ante la limitación en nuestras actividades así como en el contacto con otros, creo es importante gestionarnos nosotros mismos y priorizar nuestra salud.
En este sentido es importante que organicemos nuestro tiempo, manteniendo rutinas de días laborables y días de descanso, horarios de sueño, de comidas, y horarios de trabajo/estudio/actividades mentales y horarios lúdicos y horario de ejercicio físico. Tener algún espacio para relacionarnos con el exterior, gracias a las tecnologías, podemos seguir quedando para tomar un café o cenar. Dentro de casa, si no estamos solos poder tener tiempo de hacer actividades juntos (películas, juegos de mesa, charlar, bailar, hacer ejercicio, seguir clase de yoga, bailar,...) y tiempo para actividades separados. Si estamos solos, encontrar también un tiempo para contactar con otros.
Son días de estrés que cada uno va a manejar y expresar como pueda, es preciso que podamos comprender al otro y a nosotros mismos, darnos tiempo y respetar, porque estos días podremos estar insoportables, ariscos, irritables, contentos, exultantes, tristes, angustiados, enfadados, rabiosos,... pero que podamos controlarlo y entenderlo y apoyarnos entre nosotros.
Pensar en que es un esfuerzo individual de cada uno para un beneficio global de todos nosotros y que al lado tenemos a otros igual. De todos para todos.
Paciencia, calma, creatividad, templanza y fuerza.
